Después de una carrera llena de emoción, incertidumbre, sobresaltos y espectáculo, de nuevo el mismo habitante en lo más alto de podio. Y es que Mónaco es especial y así ha quedado demostrado. La carrera más corta en distancia pero más larga en tiempo.
La gran esperanza para los rivales directos de Red Bull pasaba por derrotarles en el trazado urbano monegasco ya que, a priori, los RB7 no podían explotar aquí tan claramente su potencial aerodinámico puesto que el grip en este trazado es más mecánico (neumáticos, equilibrio del chasis…) y quedando la aerodinámica en un segundo plano. Pese a todo, no hay duda de que la fortuna está del lado del actual campeón del mundo.
Después del dominio de Fernando Alonso en las sesiones de entrenamientos libres, de nuevo en la Q3 el coche de Sebastian Vettel puso el turbo, gracias a quién sabe que artilugio (se piensa que son los escapes sopladores pero…), y se alzó con una nueva pole, la que hace la nº 20 de su carrera, igualando a Fernando Alonso, y dejando con cara de tontos al resto. Faltaban apenas dos minutos para el final de la sesión cuando sobrevino el espectacular accidente de Sergio Pérez (sin graves consecuencias para el piloto pero que le apartaría de la disputa de esta prueba por prescripción médica) que paró la clasificación y trastocó los planes de casi todos, impidiendo a algunos acometer su vuelta rápida, ni siquiera después de la reanudación habida cuenta del escaso tiempo restante. Hamilton fue uno de los grandes perjudicados ya que forzó tanto en su vuelta que se saltó una chicane, lo que motivó que su tiempo quedara invalidado por los comisarios, quedando relegado a la novena posición. Por su parte, Fernando Alonso, cuyo 150º Italia no marchaba tan bien como en los libres, igualó su mejor resultado de la temporada al volver a salir en cuarta posición de la parrilla, por detrás de Button y Webber, respectivamente.
La salida de la carrera fue limpia, lo que ya es un logro teniendo en cuenta las estrecheces de esta pista, aunque con algunos toques en la parte intermedia que no pasaron de meros sustos. Fernando volvió a realizar una buena salida y se colocó tercero por detrás de Button y de Vettel, que pudo conservar la primera plaza. Pronto los tres pusieron tierra de por medio dejando la resolución de la carrera a las estrategias y por supuesto también a la suerte, dado que los adelantamientos en esta pista son poco menos que imposibles.
Y así fue, ya que tras la segunda parada de Button, el español pudo adelantarle ubicándose en segunda posición, siendo estás ya las posiciones definitivas de cara a la parte final de la carrera. Con estrategias totalmente diferentes, Vettel (1 sola parada), Alonso (2 paradas) y Button (3 paradas) se plantaron en una bonita batalla por la victoria. Estaban en un pañuelo. Sin duda el que más iba a sufrir al final era Vettel, ya que sus neumáticos eran los más castigados. Fernando, que además se defendía de las acometidas de Button, sabía que contaba con opciones de atacar la primera posición. Pero a falta de 10 vueltas, un accidente en el que se vieron implicados varios pilotos, entre ellos el ruso Petrov que precisó asistencia sanitaria (y que no sufre lesiones graves) provocó la segunda entrada en pista del safecty car y una posterior bandera roja, quedando parada la prueba a tan solo cinco vueltas del final. El director de carrera decidió reemprender la carrera y agotar todas las vueltas.
La mini carrera posterior, con el actual planteamiento del reglamento, descafeinó el final y se convirtió en un esperpento, ya que al permitirse la sustitución de los neumáticos, las armas volvían a quedar igualadas favoreciendo claramente al joven alemán que con ruedas frescas fue inalcanzable y con paso firme logró su quinta victoria de la temporada, igualando las obtenidas en la pasada temporada y sumando la decimoquinta de su carrera deportiva; lo que además le permite amplificar aún más la distancia con sus directos rivales, puesto que el segundo clasificado en la general, Lewis Hamilton. solo pudo ser sexto después de una carrera llena de incidentes. Entre ellos destaca el pique con Felipe Massa por la lucha de la décima posición que terminó con el brasileño contra el guardarrail del túnel, provocando además la salida del primer safecty car de la temporada en la vuelta 34 y la penalización al británico con un drive through. Pero ahí no quedó todo, ya que al después de la carrera fue penalizado con 20 segundos por un incidente con el piloto de Williams, Pastor Maldonado, que terminó contra las protecciones de la primera curva, Santa Devota; aunque dicha penalización no supuso la pérdida de su posición alguna para el inglés, que está indignado con el proceder de los comisarios de la FIA, que en tiempos pasados tanto le beneficiaron.
El equipo Red Bull falló en la parada de Vettel, pero sobre la marcha cambiaron de estrategia, improvisaron, arriesgaron yendo a una sola parada y les salió redondo. Gracias a ello el alemán superó con nota su asignatura pendiente. Era el único campeón del mundo en activo que no había saboreado la victoria en este enclave. Ha entrando por derecho propio a formar parte de la leyenda de Mónaco.
Por su parte la segunda posición lograda por Alonso, dejó un sabor agridulce, ya que si bien es su mejor resultado de la temporada, de no mediar la bandera roja y teniendo en cuenta que su estrategia a dos paradas le permitía tener mejores gomas de cara a los últimos giros, el duelo con Vettel estaba servido y seguro que hubiera quedado para el recuerdo…"Teníamos opciones reales de ganar la carrera", declaró el español en la rueda de prensa.
Sea como fuere, el caso es que Vettel se encamina con mano de hierro hacia su segunda corona y parece que no estar dispuesto a dar tregua a sus perseguidores. Los 58 puntos de ventaja que atesora sobre Hamilton que es segundo y los 74 puntos frente a Fernando, que ocupa la quinta posición de la clasificación, le procuran una importante ventaja y eso que esto no ha hecho nada más que comenzar.
Resultado de la carrera: